El pasado 8 de marzo celebramos el Día Internacional de la Mujer. Hoy os presentamos a unas auténticas luchadoras en la defensa de los animales, ellas son las Mambas Negras
Las Mambas Negras son 26 mujeres jóvenes que patrullan desarmadas la reserva natural de Balule –dentro del Parque Nacional Kruger, en Sudáfrica-. Estas mujeres, de entre 18 y 35 años, van uniformadas. El ejercito, que se formó en 2013, ha ayudado a reducir la caza furtiva dentro del parque cerca de un 70%, en su mayoría rinocerontes.
Por su labor, las Mambas Negras fueron reconocidas en septiembre de 2015 con el premio Campeones de la Tierra (más información), el mayor galardón medioambiental concedido por las Naciones Unidas. El mismo año, su trabajo también se reconoció en la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies en Peligro (CITES) celebrada en Johannesburgo (Sudáfrica). Collette Ngobeni, representante de las Mambas, denunció a la Agence France-Presse que «toda esa atención -por parte de organismos e instituciones- no se transformó en ayuda económica».
Estas mujeres luchadoras abandonan su hogar durante un mes para patrullar, tiempo en el que las Mambas viven en chozas compartidas y se turnan para poder visitar a sus familias. Ellas aman su trabajo pero aseguran que se trata de una situación muy difícil, puesto que se tienen que enfrentar a los cazadores furtivos para evitar que logren su objetivo.
Ngobeni considera que deben trabajar juntos como una comunidad para evitar este tipo de acciones, «la gente debe abrir su mente, su corazón. No se trata de dinero, se trata de nuestra cultura, de nuestro futuro.» Las Mambas Negras son todo un ejemplo de lucha en defensa de los animales y de empoderamiento mundial de la mujer.
Aunque en la reserva, los rinocerontes conviven con leones, jirafas y elefantes, son los primeros quienes más sufren la caza furtiva, siendo asesinados más de mil animales cada año en Sudáfrica.